Diógenes de Sinope fue un filósofo y pensador griego, nacido en el año 412 a.C. Se le conoce principalmente por su estilo de vida extremadamente sencillo y ascético, así como por su filosofía cínica, que se centraba en la búsqueda de la virtud y la honestidad a través de la renuncia a los placeres materiales y la adopción de un estilo de vida austero.
Aunque era hijo de un banquero, por circunstancias de su vida, acabó siendo un hombre sin hogar. Vivió en Atenas, Corinto y Esparta, lugares en los que exhibió su carácter extravagante y arremetió con improperios contra todo el mundo, desde reyes a esclavos, ganándose el desprecio del resto de filósofos de la época, de los cuales se burlaba habitualmente. Para muchos era simplemente un loco.
Diógenes es famoso por haber renunciado a todas sus posesiones y vivir en una tinaja, y por sus actos provocativos y a veces escandalosos, como pasear por las calles con una linterna en pleno día buscando a un hombre honesto. También es conocido por sus diálogos con Alejandro Magno, quien quedó impresionado por su sabiduría y le preguntó si necesitaba algo, a lo que Diógenes respondió: «sólo necesito que te apartes de mi sol».
Buscar algo útil entre lo inútil
Diógenes vivía en una tinaja y tenía muy pocas pertenencias personales. Un día, se le vio recogiendo restos de comida y basura en la calle, y cuando alguien le preguntó por qué hacía eso, él respondió que estaba buscando algo útil entre lo inútil.
Esta anécdota se ha interpretado de diferentes maneras, pero se ha utilizado a menudo para ilustrar la actitud de Diógenes hacia la riqueza y la propiedad, y su insistencia en la simplicidad y la humildad en la vida. En este sentido, se podría decir que la anécdota muestra que Diógenes no tenía una actitud negativa hacia la basura o la acumulación de objetos, sino que simplemente estaba tratando de encontrar algo que pudiera serle útil de lo que otros consideraban basura.
Hoy en día, el término «síndrome de Diógenes» se utiliza popularmente para referirse a un trastorno psicológico en el que una persona acumula grandes cantidades de objetos inútiles y basura en su casa u otros espacios, y tiene dificultades para desprenderse de ellos. Pero, en realidad, la asociación del síndrome con su nombre es más bien un caso de uso inapropiado de una referencia histórica para describir un trastorno psicológico moderno. Este trastorno puede tener causas variadas, como problemas de salud mental, trastornos de ansiedad, depresión, entre otros. Las personas que sufren de este síndrome pueden llegar a acumular grandes cantidades de objetos inservibles en su hogar, lo que puede llevar a situaciones de extrema insalubridad y riesgo para su salud.
Digiógenes y la basura digital
Estamos inmersos en un profundo proceso de transformación digital, que entre otros aspectos clave tiene como objetivo la gestión eficaz de los datos y la información, ya que cada vez más actividades y procesos se llevan a cabo de forma digital.
Sin embargo, la acumulación desordenada de datos digitales también puede ser un problema, y se puede hacer una analogía con el síndrome de Diógenes, dado que la acumulación masiva de datos puede generar un desorden que dificulta la gestión y el uso efectivo de la información. A esta versión actualizada (o 2.0) le llamo síndrome de Digiógenes.
Cada vez son más las personas que almacenan gran cantidad de archivos digitales en su ordenador, dispositivos de almacenamiento o en la nube, incluso aunque esa información no tenga ningún valor o utilidad. Les guía el criterio del “por si acaso”.
Esta acumulación excesiva de archivos digitales ocasiona problemas de organización, dificultades para encontrar información relevante, pérdida de tiempo y productividad, así como problemas en la gestión de recursos informáticos. También afecta la capacidad de la persona para tomar decisiones informadas y para enfocarse en lo que realmente es importante.
La acumulación de archivos digitales no es necesariamente un síntoma del síndrome de Diógenes ya que existen otros factores que pueden influir en este comportamiento, como la falta de conocimientos en la gestión de archivos o la tendencia a procrastinar.
Por esta razón, en todo proceso de transformación digital es importante desarrollar estrategias de gestión de datos y de información que permitan mantener un orden adecuado y una gestión efectiva de los mismos, evitando la acumulación desordenada y la falta de organización en los procesos digitales.
El mejor tratamiento: la gestión documental
Para combatir el síndrome de Digiógenes en la acumulación de archivos digitales es necesario implementar una adecuada gestión documental que permita:
- Clasificar los archivos: Es importante categorizar y organizar los archivos digitales de forma sistemática, utilizando una estructura de carpetas bien definida con nombres de archivo claros y consistentes. De esta forma estarán organizados y serán de fácil acceso.
- Eliminar archivos innecesarios: Al igual que con los objetos físicos, es importante hacer una revisión periódica de los archivos digitales para eliminar aquellos que ya no son necesarios. Se puede establecer un calendario para realizar esta limpieza cada cierto tiempo.
- Establecer un plan de retención de archivos: Es importante definir un plan de retención de archivos que permita conservar los archivos digitales importantes durante el tiempo que sea necesario, de acuerdo con las regulaciones y requisitos de la empresa o a las necesidades personales.
- Utilizar herramientas de gestión documental: Existen diversas herramientas de gestión documental que pueden ayudar a organizar, buscar y recuperar los archivos digitales de manera eficiente. Algunas están instaladas en los equipos (on-premise) y otras están en la nube (cloud). El objetivo de todas ellas es mejorar la eficiencia, la productividad y la seguridad en la gestión de los documentos, independientemente de su formato o medio de almacenamiento. Las más habituales son: Microsoft SharePoint, Google Drive, Dropbox, Adobe Document Cloud, OpenKM, Alfresco, DocuWare, M-Files, Laserfiche o Box. La elección de una solución dependerá de las necesidades específicas de cada persona u organización y de sus requisitos de gestión documental.
- Almacenar los archivos en la nube: Almacenar, con los criterios mencionados anteriormente, los archivos en servicios de almacenamiento en la nube como Dropbox, Google Drive o OneDrive puede liberar espacio en el disco duro del ordenador y facilitar el acceso a los archivos desde cualquier dispositivo. El coste del servicio para el espacio contratado es una limitación que obliga a racionalizar su uso.
- Aprender sobre gestión de archivos digitales: Aprender sobre técnicas y herramientas para gestionar archivos digitales, como la indexación y la organización por etiquetas, puede ser útil para evitar la acumulación innecesaria de archivos y mejorar la productividad. En las empresas es importante capacitar a los empleados en el uso adecuado de la gestión documental y establecer políticas y procedimientos claros para garantizar su cumplimiento.
El síndrome de Digiógenes puede ser un problema real en nuestra era digital, pero con la ayuda de soluciones de gestión documental y la implementación de hábitos de organización personal, podemos evitar la acumulación innecesaria de archivos digitales y lograr una gestión efectiva y ordenada en nuestras vidas digitales.
Definición de manipulador de alimentos dice
Que interesante, no conocía de donde procedía el término de Diógenes. (: