En estas fechas todo el mundo está agitado eligiendo los regalos idóneos para sus seres queridos.
Un regalo, además de un bien físico es una manera de materializar el afecto que sentimos hacia otra persona. Por ese motivo, debe reunir ciertas cualidades que la elección sea la más acertada. Quien regala debe tener en cuenta las preferencias y necesidades del destinatario, lo que éste ya posee, lo que carece, aquello que le urge más, lo que le haría una ilusión especial poseer o aquello, que por inesperado, le sorprendería dejándole un recuerdo imborrable para el resto de su vida.
El boom de este año están siendo los cofres regalo, una selección de experiencias temáticas que permiten a la persona que regala inspirarse ante el amplio catálogo de posibilidades que ofrecen las empresas que se dedican a empaquetar sensaciones en una cajita de escasas dimensiones.
La oferta es muy amplia: escapadas rústicas, pintorescas, cosmopolitas, estancias en hoteles con diseño, noches románticas en lugares con encanto, visitas a parques naturales, enoturismo, catas entre viñedos, exóticos viajes, gastronomía creativa o internacional, cocina de autor, deportes de aventura o de riesgo, tratamientos de belleza, momentos de relax, cursos de buceo, vuelos en globo o parapente, paseos a caballo, conducción de vehículos deportivos en circuitos de carreras, excursiones en Buggy, kitesurf, peluparties o un fin de semana futbolero, que incluye visita al museo de tu equipo, recorrido por sus instalaciones deportivas y asistencia a un partido de fútbol.
Éstas son sólo algunas de las incontables posibilidades que ofrecen firmas como Plan B, La vida es bella, SmartBox, Wonderbox o Dakotabox. En sus websites se pueden encontrar segmentados por temática, sexo, edad o precio. La horquilla de precios abarca todas las capacidades adquisitivas.
La operativa es muy simple. La caja incluye una Guía de opciones relacionadas con la experiencia seleccionada y una tarjeta o cheque regalo. El receptor del obsequio, elige la opción deseada, reserva y, en el momento de hacer uso de su regalo, entrega su tarjeta o cheque regalo. ¡Y a disfrutar!
Alguna de las citadas firmas ofrece, incluso, un asesor experiencial para orientar a los compradores indecisos entre miles de experiencias distintas.
La estrategia de distribución comenzó siendo selectiva, pero progresivamente se está transformando en una distribución extensiva, dado que los cofres regalo se comercializan ya en grandes superficies, tiendas de electrodomésticos, oficinas de Correos, tiendas de deporte, establecimientos de telefonía, tiendas de moda, centros comerciales, librerías, agencias de viaje, etc. Además, algunos de los operadores del sector están inaugurando puntos de venta propios.
En realidad, el producto consiste en seleccionar un servicio relacionado con el bienestar, el ocio, el turismo, la gastronomía, el deporte, la aventura, el amor o la familia y hacerlo tangible a través de una combinación de elementos físicos como una caja, una guía y una tarjeta. Y de este modo, convertimos un servicio habitual en una experiencia única e irrepetible.
La alternativa a esta fantástica opción es evidente, consiste en el tradicional “¡hágaselo usted mismo!”. En ese caso, a las vivencias que disfrutará el receptor del regalo se añaden las emociones de quien diseña con mimo cada uno de los detalles que lo conforman.
Regalar es una experiencia tan fascinante como recibir un regalo, porque es una forma original de expresarle a otras personas lo que sientes por ellas.
Suerte en tu búsqueda y … ¡elige bien la experiencia que quieres regalar!
M dice
A mi me regalaron un par de cofres de la marca Smartbox y la verdad es que lo pase muy bien. Mi experiencia la tengo colgada en un post en mi blog. Saludos
Nombre* dice
Esta muy bien el blog, no lo conocía hasta ahora, me pasaré más a menudo a leerlo. Aprovecho para felicitarte el 2012, un saludo!!